Se que las circunstancias no son las mejores, pero tampoco debería ser una excusa más, para tirar la toalla en cuanto a propósitos alimenticios deseados. Si en tu caso te has tenido que quedar en tu casa vamos a tomárnoslo con tranquilidad y si te ha tocado trabajar, mucho ánimo y no olvides cuidarte para no perder toda la energía que necesitas.
La ruptura con nuestra rutina diaria, la obligación de tener que estar aislados. Hace que la comida sea muy recurrente en estas situaciones. Produce una falsa sensación de felicidad en el cerebro y no aporta los nutrientes necesarios para el cuerpo.
La salud depende en cierta medida de la alimentación y nuestra gestión emocional, y esta situación puede convertirse en una gran oportunidad para aprender y mejorar nuestra salud, tanto física como emocionalmente
Vamos por consejos muy básicos y factibles.
- Anota en un cuadrante semanal. Las horas a las que vas a entrenar, las horas de las comidas o por las tardes, a que te gustaría destinar tu tiempo. Ponlo en un sitio visible para que lo veas diariamente.
- No improvises la compra. Anota en la lista lo necesario. No vayas con hambre (es los consejos más populares que se reciben ante la compra).
- Compra alimentos integrales: Integral viene de la palabra “íntegro” que quiere decir que los alimentos tienen todos sus nutrientes. Esto ayudará a nutrir a las células y a reducir así la sensación de hambre. Manteniendo de esa forma el nivel de glucosa en el torrente sanguíneo.
- Es importante recordar que lo que no se compra, no se come. Compra alimentos que puedan conservarse durante meses: para cumplir con el estado de alarma que se ha impuesto y no tener necesidad de salir a la calle y exponerse ante el peligro, por ejemplo, arroz integral, pasta integral, avena, legumbres, frutos secos crudos sin sal, aceite de oliva virgen extra, productos congelados como carne y pescado; etc.
- Intentamos controlar las cantidades. Es interesante seguir el plato saludable de Harvard o método del plato. La idea es priorizar los alimentos que son ricos en nutrientes. Evita los alimentos procesados, la bollería y los snacks. Muy ricos en grasas trans y saturadas y además contienen mucha sal y azúcares. Si estas acostumbrado hacer 5 comidas y tu actividad se ha reducido drástica intenta hacer las 3 comidas más elementales. (Desayuno, comida y cena)
- NO OLVIDES comer fruta todos los días: consumir dos piezas de fruta al día, así como diferentes verduras, ayudan al sistema inmune.
- Mantente hidratado. Intenta no consumir bebidas azucaradas ni alcohol, porque esos serán muchas más calorías sumadas a lo que comes. Bebe agua o en su defecto ante una limonada, toma infusiones, caldos, bastante verdura, etc.
- Ahora que tenemos más tiempo es el momento de buscar nuevas recetas de cocina: distraer al cerebro a través del aprendizaje, es una forma de gestionar nuestras emociones.
- Comer con conciencia. Estamos viviendo un momento complicado que nos ha obligado a cambiar nuestro estilo de vida de manera radical. En estos días ha aumentado en consumo televisivo. Ver las noticias diarias han producido una situación de estrés y ansiedad entre la población. La clara muestra de ello fueron las imágenes que todos hemos visto de supermercados abarrotados, estanterías saqueadas y, todavía sin explicación, la necesidad de conseguir los tan preciados rollos de papel de WC, más aún cuando las autoridades han advertido en todo momento que el abastecimiento de productos de primera necesidad están garantizados. APARTA LA TELEVISION O REDES SOCIALES DURANTE EL DÍA. Simplemente mantente informado y desconecta mayor parte del tiempo.
El problema sería si la ansiedad se alargue en el tiempo. Debemos saber bien el origen de la ansiedad. En qué películas nos estamos perdiendo. De esta forma podremos gestionar nuestra forma de pensar.
- Realiza actividad física en casa. A parte de ayudar al balance energético. La actividad física nos ayuda a disminuir los niveles de estrés y ansiedad, con lo cual, nos estará ayudando a fortalecer nuestro sistema inmune y disminuir el hambre emocional. Busca algo factible para ti y haz mínimo 30 minutos 5 días a la semana. Aunque sea un tabla de abdominales. Haz lo mínimo.
- Evitamos alcohol. O nos lo permitimos en momentos puntuales como el fin de semana. Una cerveza no va a ningún lado. Si no eres capaz de tomar una cerveza, evita el alcohol.
- ¿Has cumplido a lo largo de la semana? Pues cuando llegue el finde prepárate una comida libre. Prepárate lo que te apetezca sin comer a reventar. Por ejemplo, un plato de patatas fritas con huevo frito con tu pan y un postre o sesión cine con unas palomitas, más unos nachos con tu refresco, etc.
Frecuentemente me habláis de que no podéis controlar el hambre. Puede ser que hayas improvisado todo el día o te hayas privado de comer. En el caso, de tener el famoso antojo. Deberías tener el control de elegir ese antojo. Hay tenéis un artículo para esos casos puntuales. https://lidiabastian.com/465-2/
MUCHO ÁNIMO
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